lunes, noviembre 14, 2005

Franja electoral; Presidenciables.


Esta es la historia de un país llamado Chile, emplazado en una población callampa, en el que todos sus habitantes se juraban los “new rich” de la cuadra. Resulta que estos compatriotas sufren una pequeña alteración en sus televisores, todos los días de 20:40 a 21:00 horas. ¿Y que ven?:

Acto1: Hombre canoso, bordeando los 50 años, un winner, contándonos que quiere ser presidente, pues como el es empresario nos puede dar empleo, si es tan considerado…Además nos muestra su vida, ideal, de ricos y famosos, sus hijos son profesionales, tiene un matrimonio estable y además sale posando pal video galopando a caballo (¿se puede galopar otra cosa?, cual Robin Hood corriendo tras los ricos para robarle a los pobres. Claro, además este hombre tiene un origen de clase media, así que supuestamente nos podríamos identificar algo con él. Finalmente voten por mí, Sebastián Piñera el Ganador.

Nota al margen: cuatro de cinco minutos se reitera la palabra Yo,yo, yo,….

Acto2: “Yo quiero un país con mas camas que enfermos”.

Tras la frase para el bronce aparece una mujer anti menudita, con pelo pajoso al estilo melame, “el mono”, y unas marcadas encías que florecen tras su sonrisa. Bachelet se llama, y proclama igualdad para hombres y mujeres, junto con su segunda frase “o acaso me van a pagar menos que al presidente Lagos”. Curiosidad causa, que junta con ofrecernos un país más diverso aparece una pareja de hombres tomados de la mano. Finalmente remata con “Estoy Contigo”.

Acto 3: Un irónico Hirsh aparece representando, según él, al Chile de los excluidos. Además nos habla de lo perverso de la globalización, mientras recorre una micro con varios personajes que “juntos pueden mas, pero entre ellos no hacen uno”.
Y curiosamente hace alusión a que Salvador Allende habría votado por Hirsch.

Acto 4: Un hiperventilado Joaco Lavín nos asusta diciéndonos que está quedadndo la cagá en el país con la delincuencia y el desempleo, nos aterroriza, así al terminar la franja no olvidamos ponerle la doble chapa y el pestillo a la puerta principal.
Primera frase cliché:” Hay un chile bonito, de los que tienen, de los que les ha tocado...y un chile de los que no les ha tocado”.
Durante el transcurso de sus 5 minutos felices, Lavín nos habla con una postura de gerente general, sentado “informal” sobre su escritorio del piso 40 de un edificio top del barrio alto. Con nosotros meados con la psicosis termina pompín.


“Puta que la cagaron estos huevones, nos cortaron la teleserie justo cuando estaba en lo mejor, ojalá termine luego esta hueá y se dejen de cagarnos la onda, llegamos cansaos y lo único que queremos es distraernos un rato”.

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