viernes, junio 20, 2008

Todos quisimos ser reina.

Cuando nos creemos la antítesis del Super Hombre Nietzschiano, cuando creemos que el Hombre, mas que el Super debe ser un ente sensible preocupado por el resto, viene la crisis del problema “no-mio”. El tragarse problemas no creados por mi, pero que sin embargo me afectan. Quizás es la vuelta de mano de los problemas que uno muchas veces le crea a la familia. Bueno, y como dice Carlos Fuentes, las familias felices son muy típicas, muy obvias y aburridas. Las verdaderas familias son aquellas que se enfrentan a los problemas y con su escaso tacto emocional tratan de arreglar los entuertos. Lidias con los alterados y los llorones, todo eso es parte del juego. Debo reconocer, eso si, que soy un poco esponja familiar, me tengo que bancar los líos de los otros, y por mas que trate de abstraerme con mi inventada racionalidad, no puedo. Me desconcentro pensando en las soluciones, y me achaco porque no me dejan tener mis problemas. ¡Mira que curioso, me complico porque no me dejan tener problemas!. Pero si, quiero dar mis peleas y no la de otros. Aunque parezca egoísta, preferiría que los otros se las arreglen entre ellos; que ellos hagan las movilizaciones y los paros, y luego yo aproveche los beneficios. Pero no puedo.

Hoy quiero que vuelva la motivación. Paso el aviso, arriendo o compro ilusiones. Hasta el momento mi lucha es estudiar para mandarme a cambiar y no bancarme los no-mi-problema, pero cuando entré a la U, me motivaba aprender, aprender y aprender. Creo que el tiempo me curtió y me llenó de cicatrices, me ha vuelto un hombre enrrollado en tonteras, con ganas de volver a disfrutar los clichés Hollywoodenses, el caminar por la playa, o cagarme de la risa con tonteras.

Porque creo que soy un loco lindo me merezco respirar tranquilo.

Creo que nunca es tarde para retomar cosas, conocer la fe, y hacer las cosas de la mejor forma.

Y de verdad creo en que la buena onda se puede traspasar, puedo generar una sonrisa, puedo decir buenos días con una sonrisa mas grande cada día, puedo ser reina de belleza, salvar al mundo, querer a los animales y admirar a sor Teresa de Calcuta y al Papa.

Lo invito en mi reinado a ser buena onda conmigo y con todos, aunque sea con gotario.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Tio PAto, yo tb quise ser reina pero la realidad siempre nos pega en la cara y nos hace dar cuenta q no estamos aislados: es casi un deber "absorber" y vivir el problema del de al lao (aunq uno no quiera). Aplquemos Efecto Mariposa para darnos cuenta q aunq demos un aletazo pequeño, eso se convertirá en un gran tornado. Hagamonos responsables y seamos protagonistas de esta vida q nos tocó, con o sin el familiar q tiene problemas y hay q prestarle oreja.

Prefiero ser Drama Queen q tener un presente monótono.